Conocí hace 11 días a un político llamado Ramón Cabrera
Hoy 13 de octubre es el cumpleaños de Ramón Cabrera y lo primero que me llegó a la mente fueron los testimonios que me dieron dirigentes del PLD en la Romana sobre la capacidad organizativa del veterano ex diputado
El sábado 2 de octubre fui invitado a San Pedro y la Romana por los queridos amigos Adonis y Rafael para ver de primera mano la situación política de esa provincia.
Mi experiencia en San Pedro la narraré en otra ocasión. Al llegar a la Romana vi cientos de personas en los alrededores de una plaza y dentro un enorme salón repleto de gente esperando a precandidato presidencial peledeista Abel Martínez.
Al ver a Cabrera sentí que era una imprudencia saludarlo, mientras estaba trabajando con la dirigencia local que no se escapara un solo detalle del acto que estaba próximo a empezar. Se notaba en él ese afán de que los dirigentes locales de esa provincia sean las estrellas del acto.
Cabrera andaba con una reducida, pero efectiva comisión de su equipo íntimo, quienes de manera discretas se aseguraban que cada parte estuviera sincronizada como la de un reloj Suizo.
Me quedé con el deseo de saludar a Jennifer, Juan Tomas, Daniel, los muchachos del CC y otros, pero no podía ni debía distraerlo un segundo.
Me aparté de mis amigos y me dedique a indagar con la dirigencia de esa provincia la razón del crecimiento de un precandidato de Santiago en una provincia del Este.
Hablé con 24 dirigentes incluyendo presidente de CI y Miembros del CC, quienes me informaron que de los principales dirigentes provinciales Abel contaba con 16 de 19.
Le pregunté cómo Abel había logrado aglutinar esa estructura a su alrededor y me narraron la siguiente historia.
Cuando Cabrera fue nombrado enlace de Abel Martínez, encontró que su precandidato contaba con un solo dirigente y se fajó a visitar dirigentes en campos, bateyes, cañaverales. Se mudó literalmente en este pueblo junto a un equipo de 5 o menos personas.
Ese Cabrera usó todos tipos de métodos para construir esa candidatura, incluso se valió hasta de diputados de su provincia que tenían relaciones primarias con algún dirigente y se lo chubaba.
Lo más importante de él como enlace es su capacidad de escuchar y de trabajo sin buscar protagonismo.
Regresé de la Romana más convencido de que Cabrera es mejor estratega político que la dos tercera parte de los miembros del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana.