La Bella era una madre soltera de 20 años que luchaba por progresar y darle una buena educación a su hijo.
Una tarde de verano del 2001, que no quiere recordar, llegó a la casa de su madre el novio de Talia, en compañía de un joven del color de Johnny Ventura.
El novio deTalia que tiene nombre de un fallecido cantante de rock fue en compañía del joven chocolate con la idea de hacer un dos para dos, ya que la madre de Talia solo la dejaba salir en compañía de la bella.
Desde esa noche La Bella fue secuestrada por un espíritu tenebroso que le dañó el gusto de tal manera, que veía lindo todo lo referente al Chocolate.
Los ojos de la Bella miraban las ropas grises del chocolate como si tuvieran los colores más vivos del universo. El pequeño carro de color opaco que conducía el Chocolate se dibujada dentro del cerebro de la Bella como un todoterrenos de lujos.
Durante meses el Chocolate fue el enamorado más tierno del universo y la Bella se entregó en cuerpo y alma a ese hombre que amaba tanto y que había despertado en ella las más profundas y atrevidas pasiones.
Las amigas comenzaron a llamarla come vidrio, pero nada ni nadie le impediría convivir con el hombre que la derretía, solo pensaba en ese macho que amaba ciegamente.
La Bella llena de ilusiones accedió mudarse con el Chocolate en un angosto apartamento.
El primer mes fue casi perfecto, el segundo mes regular y el tercero un desastre.
Cuando la Bella anuncio su embarazo, se le dibujó al Chocolate una sonrisa fingida, pero en la madrugada la despertó para pedirle que interrumpiera el fruto de su amor.
La Bella lloró desconsoladamente ante tan cruel petición y al ver que en la mañana siguiente el hombre no habló más del tema, pensó que se lo había soñado, porque el amor tan grande que ella tenía por aquel hombre le impedía ver el disgusto que sentía su azabache con tan inoportuna fertilidad.
El hombre caballeroso empezó a desaparecer lentamente y cuando en la noche él descargada la furia de su pasión llegaba una tensa calma acompañada de un mal humor bipolar.
El Chocolate y la Bella duraron 4 meses de intensa actividad pasional y en cada día se repetía la misma rutina. El era amable ante de comerse el fruto prohibido y cuando se saciaba miraba con odio a la Bella y la apartaba de su lado.
A las 18 semanas, el vientre de la Bella comenzó a revelarle al público que el Chocolate sería papá y eso provocó en él que la escondiera y evitaba que su familia la viera.
Los momentos de intimidad se redujeron a cero y el mal humor del Chocolate se incremento se incrementó de manera exponencial.
Las violencias psicológicas empezaron de manera sutiles y fueron subiendo de tono.
A las 21 semanas la indefensa mujer había descubierto un rosario de infidelidades, pero callaba por temor a que el Chocolate se regara como la cosa aquella.
A pesar del maltrato que recibía, ella sentía que tenía el novio perfecto y hacia todo por conservarlo.
Cuando él salía a la calle ella sentía la angustia de que en cualquier momento lo perdería.
El Chocolate en público era un amor, pero de regreso a casa y con ausencia de testigos utilizaba un arsenal de palabras hirientes para destruirle la autoestima.
El mes de mayo inicio con un comercial en la tv de que había llegado el mes de la madre. La Bella con una panza de casi 7 meses abrazó al Chocolate y con una sonrisa de niña buena le preguntó
-Que le va a regalar de madre a tu novia
El Chocolate desvió el tema, le miró con deprecio la panza y o con una pequeña sonrisa forzada le comunicó a ella que se iba de viaje a la tierra de José Marti a un negocios.
-La próxima semana me voy y es mejor que esos días lo pase donde tu mamá.
La Bella entendió que su presencia sobraba en ese apartamento y tan pronto él se fue al trabajo, ella empaco su maleta y regresó a casa de su madre.
Pasaron días, semana y el chocolate no daba señales de vida y la Bella rezaba todas las noches para que no le pasara nada malo al chocolate en la Isla Fascinante.
A los 45 días supo que nunca viajó a la tierra comandante de cuartel Moncada y que desde que desapareció se había mudado con una mujer que tenía un chocolatico de 7 meses.
Los últimos dos meses fueron terribles para aquella mujer abandonada por el hombre más mentiroso del planeta.
La tarde de aquel sábado soleado la Bella recibió un regalo que le cambio la vida por completo.
El potente grito de aquella criatura habían borrado los nueve meses de mayor maltrato y sufrimiento de su vida.
Ella recuerda con deleite aquella criatura llorando y con los puñitos cerrados como si estuviera listo para defender la alegría de aquella madre que sonreía con cara de loco por la emoción de recibir el regalo más grande que una mujer puede poseer.
A 2 kilometro de distancia, el chocolate sabía que se había convertido en padre otra vez, pero una reunión social con sus amigos pospuso la visita hasta el otro día