Un amigo se lamentó de que el PLD o los aspirantes a la alcaldía del partido morado no hayan aprovechado esta coyuntura política para posicionarse en la mente del votante de Santo Domingo Este.
El PLD es un partido que desde su fundación se caracterizó por hacer oposición firme, pero constructiva y e cada tranque en que se veía amenazada la gobernabilidad planteaba soluciones democráticas y productivas.
Volviendo a mi conversación ese amigo me dijo lo siguiente: Recuerda que Cabrera es un animal político que vive maquinando como darle puntos a su partido y la causa que se dedica, mira lo que hizo en la Romana con Abel.
Sí Cabrera hubiera sido el candidato del PLD de la pasada elecciones municipales, hoy estuviera camino al ayuntamiento para dar una rueda de prensa con los regidores del PLD que le sumaría entre 5 a 12 puntos a su figura y a su partido.
Empezaría criticando al alcalde por falta de gerencia, falta de planificación y al final sorprendería diciendo que el bloque del PLD votará a favor de que 3,500 familias puedan cobrar y que ese partido seguirá vigilando los intereses del municipios.
Dijera que el bloque del PLD hará todo su esfuerzo para evitar que el alcalde deje sin regalía pascual a los servidores del Ayuntamiento de Santo Domingo Este.
Al final le pregunté ¿Por qué esta tan seguro que Cabrera haría algo así?
El amigo me miró de arriba abajo y me dijo: -No te haga el pendejo, tu sabes que ese amigo nuestro lo haría porque el mejor estratega político de Santo Domingo Este no iba a desaprovechar la oportunidad de escribir un titular que diga gracia a Cabrera y el PLD 3,500 familias de SDED podrán poner comida en sus mesas.
Al llegar a mi casa le pregunté a mi hija que pasaría sí sucediera eso que acabo de narrar y me comentó lo siguiente: La gente diría que sí está resolviendo sin ser alcalde, imagínense sí estuviera dirigiendo la alcaldía. Y luego me preguntó
¿Papi por qué el PLD no aprovechó esa oportunidad de convertirse en el salvador de esos empleados?
Me quedé callado, no sabía que decirle.